La Iniciativa de Bitcoin de Bukele Enfrenta Obstáculos
La decisión de Nayib Bukele de adoptar el bitcoin como moneda legal en El Salvador se ha encontrado con varios desafíos, más de dos años después de su implementación. La medida, que captó la atención internacional en septiembre de 2021, no ha logrado el uso masivo ni las expectativas que suscitó inicialmente.
Según el economista José Luis Magaña, la iniciativa puede considerarse un fracaso en cuanto a no cumplir con los objetivos planteados, como la inclusión financiera, el aumento de la inversión extranjera directa y la optimización de las remesas a través de bitcoin. Una encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública (Iudop) reveló que el 88% de los salvadoreños no utilizó la criptomoneda en 2023.
La adopción del bitcoin ha generado un “hoyo negro” en las finanzas públicas, con más de 200 millones de dólares utilizados en su implementación. Las promesas de crecimiento económico y mejora en la inclusión financiera aún no se materializan, y las remesas a través de billeteras de criptomonedas han disminuido significativamente.
La pobreza en El Salvador ha visto incrementos significativos, lo que pone en duda la efectividad de la criptomoneda para mejorar la situación económica del país. A pesar de estos desafíos, es poco probable que el gobierno de Bukele abandone la iniciativa, especialmente ante un posible segundo mandato.
Perspectivas Futuras
La continuación del proyecto de bitcoin podría requerir un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, lo que implicaría ajustes en la estrategia del gobierno respecto a la criptomoneda. Proyectos como los Bonos Volcán y la Bitcóin City no han avanzado como se esperaba, lo que plantea interrogantes sobre la viabilidad a largo plazo de la apuesta por el bitcoin en El Salvador.
Observaciones desde las Calles
A pesar de la adopción oficial, el uso del bitcoin en la vida cotidiana de los salvadoreños es limitado, con una implementación que varía entre ciertos comercios y servicios. Iniciativas educativas buscan aumentar el conocimiento sobre la criptomoneda, aunque la adopción masiva sigue siendo un objetivo lejano.
