El Banco Central de Bangladesh anunció el martes que incrementará su tasa de interés clave en medio punto porcentual, marcando la cuarta vez este año que sube las tasas en un esfuerzo por combatir la inflación, que sigue siendo alta. Esta medida se toma en un contexto de creciente presión inflacionaria, agravada por disturbios políticos recientes y los problemas que enfrenta la importante industria textil del país.
El aumento en las tasas tiene como objetivo frenar la inflación, que ha estado afectando duramente a la economía de Bangladesh. Según el banco central, la tasa repo, que es la que se utiliza para inyectar dinero en el sistema bancario, subirá en 50 puntos básicos, situándose en un 10%. Este cambio entrará en vigor el 27 de octubre.
Además, el banco central también incrementará otros tipos de interés clave. El límite superior del "corredor de tipos de interés de política", conocido como la Facilidad Permanente de Préstamo, subirá a 11,50%, mientras que el límite inferior, la Facilidad Permanente de Depósito, aumentará a 8,50%. Estas medidas forman parte de una estrategia más amplia para controlar la inflación en el país.
El gobernador del Banco de Bangladesh, Ahsan H. Mansur, quien fue designado en agosto, explicó que aunque se espera que la inflación baje significativamente en el próximo año, podría pasar más tiempo antes de que se puedan reducir las tasas de interés. Mansur fue nombrado por el gobierno interino de Bangladesh, encabezado por el economista y ganador del Premio Nobel Muhammad Yunus. Este gobierno asumió el poder tras el derrocamiento de la Primera Ministra Sheikh Hasina, quien huyó a la India el 5 de agosto después de un violento levantamiento en su contra.
A pesar de que la tasa de inflación general mostró una ligera disminución en septiembre, la inflación en los precios de los alimentos sigue siendo muy alta, superando el 12%. Esto está afectando gravemente a la población, especialmente a los sectores más vulnerables de los 170 millones de habitantes de Bangladesh.
El gobierno interino ha solicitado 5.000 millones de dólares en ayuda financiera de prestamistas internacionales, con el objetivo de estabilizar las reservas de divisas del país, que han estado disminuyendo rápidamente. Además, buscan reactivar la economía, que hace solo unos años era una de las de más rápido crecimiento en el mundo.
Bangladesh ha enfrentado serias dificultades para pagar sus importaciones debido al aumento de los costos de bienes como el combustible, una situación que se ha agravado desde el inicio de la guerra en Ucrania en 2022. Esto ha forzado al país a recurrir a un rescate financiero de 4.700 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI) para mantenerse a flote.
La industria textil, que es crucial para la economía del país, también ha sufrido impactos significativos debido a la inestabilidad política y el aumento de los costos de producción. Bangladesh es uno de los principales exportadores de textiles en el mundo, y las dificultades que enfrenta este sector están poniendo en riesgo el crecimiento económico y los ingresos del país.
En resumen, el Banco Central de Bangladesh ha decidido aumentar las tasas de interés para combatir la inflación persistente, especialmente la de los alimentos, que sigue afectando a gran parte de la población. Aunque se espera que la inflación general comience a disminuir, es probable que las tasas de interés sigan altas por algún tiempo. Además, el país enfrenta desafíos económicos significativos, como la disminución de las reservas de divisas y las dificultades para pagar las importaciones, lo que ha llevado al gobierno interino a buscar ayuda financiera internacional. Con un contexto político complicado y una economía que necesita reactivarse, Bangladesh está tomando medidas para estabilizar su situación económica y contener la inflación.