La provincia de Santiago está experimentando progresos significativos en la construcción y rehabilitación de centros educativos, aunque las ampliaciones para áreas de educación inicial presentan una ejecución preocupantemente baja. Este artículo examina los detalles del informe de la Dirección General de Presupuesto (Digepres) sobre la inversión en educación, analizando tanto los logros como los retos que enfrenta la región en esta importante área.
El informe de la Digepres revela que, hasta el 15 de agosto, se han asignado RD$128 millones para proyectos de construcción y rehabilitación de planteles educativos en Santiago, de los cuales se han ejecutado RD$79 millones, lo que equivale a un 61.7% de ejecución. Esta cifra indica un avance notable en comparación con años anteriores, lo que sugiere un compromiso por parte de las autoridades para mejorar la infraestructura educativa en la región.
Sin embargo, la situación es diferente en lo que respecta a la ampliación de áreas para educación inicial, donde se han destinado RD$136.4 millones para habilitar 66 planteles educativos. Hasta la fecha, solo se han ejecutado RD$29 millones, lo que representa un alarmante 21.2%. Este desbalance en la ejecución presupuestaria resalta la necesidad urgente de priorizar la educación de los más pequeños, quienes son la base del futuro educativo del país.
El informe también destaca la construcción de 46 planteles educativos en Santiago que, sorprendentemente, no cuentan ni con asignación ni con ejecución. Este tipo de proyectos no solo es preocupante, sino que también genera incertidumbre sobre el compromiso del gobierno local para garantizar una educación de calidad. Asimismo, se menciona la rehabilitación de 12 planteles escolares, que también carecen de asignación y ejecución, lo que pone de manifiesto una falta de planificación y seguimiento en la gestión de recursos.
En cuanto a la fase 3 del proyecto de ampliación de planteles educativos, se reporta una ejecución de RD$15.1 millones, a pesar de que no existe una asignación presupuestaria formal registrada. Este tipo de situaciones sugiere que, aunque se están llevando a cabo algunas obras, la falta de transparencia y planificación podría comprometer el éxito a largo plazo de estas iniciativas educativas.
Otro aspecto a considerar es que algunas ampliaciones para educación inicial han mostrado partidas ejecutadas que superan los montos originalmente asignados, lo que podría indicar una administración ineficiente de los fondos públicos. Esto contrasta con la mayoría de los casos, donde los proyectos tienen asignación, pero carecen de ejecución efectiva, lo que plantea interrogantes sobre la gestión de recursos y la capacidad de las autoridades para cumplir con los plazos establecidos.
En conclusión, aunque la provincia de Santiago está avanzando en la construcción y rehabilitación de centros educativos, la baja ejecución en las ampliaciones para educación inicial y la falta de asignación en varios proyectos son señales de alerta. Es fundamental que las autoridades revisen y ajusten sus estrategias para asegurar que todos los niños, especialmente los más pequeños, tengan acceso a un entorno educativo adecuado y de calidad. La educación es un pilar esencial para el desarrollo de cualquier sociedad, y su correcta gestión debe ser una prioridad innegable.